
El otro día Ale me dijo, guarda que los juguetes tejidos se vuelven una adicción. Y así es.
Hoy les traigo estas tortuguitas tejidas en dos agujas, cuyas instrucciones están por acá.

¿Pero como resistirse a la tentación de hacer algo tan lindo, rápido, y gastando tan poco material?

Me encanta tejer muñecos, porque en un rato, o unas horas, dependiendo el proyecto, están terminados, y además me permiten aprender muchas cosas cuando uno va tratando de que tomen distintas formas. Cuando descubrí los juguetes, se me abrió realmente un nuevo camino ante mis ojos.
Igualmente sigo tejiendo ropa, que también me encanta.