Bueno, no, tampoco la pavada, pero al menos ya tengo unos conceptos básicos en cuanto al tratamiento del vellón y al hilado en huso y rueca (esto si es que dificilito, yo pense lo contrario, ¡hay que tener coordinación! jajajaja)
Recién hoy me pude sentar a hacer esta entrada, si bien llegué el viernes por la mañana, aún saturada por el ruido de Buenos Aires. Así que el viernes a reponerme del viaje relámpago, el sábado a laburar, el domingo toda la tarde con el club de lectura (charlamos de "Señora Dalloway" y "Cumbres Borrascosas"), hoy fui a comprar "La letra escarlata" que es la próxima a leer con las chicas, pero me copé y además me traje "Orgullo y prejuicio" (si, estoy de lleno con este tipo de novelas), también alguna lanita, porque andan rumores de que van a cerrar los negocios por lo de la gripe, y si me tengo que quedar recluida necesitaré algo par entretenerme!
Si, todo muy lindo, pero Luciana ¿cómo te fue en el viaje?
LLegué a baires a las 6.30 horas. Nada glamoroso los alrededores de la estación retiro, encima no me gustan las ciudades, me pregunté ¿Dónde me meti?
Me quedé ahi hasta después de las ocho que amaneció, y salí a la selva. Casi me pierdo convinando subtes. Llegué al lugar del curso una hora antes que empieze el mismo, igual entré y por suerte todos super amables me quedé charlando con Horacio "el profe" que le estaba dando los últimos toques a los husos que él hizo y que más tarde nos regaló. De a poco fueron llegando todos, gente que sabia tejer, gente que no, el grupo era muy heterogéneo. Algunas chicas que conocia de la pagina ravelry también.
Aprendi mucho, me divertí un montón, nos sacamos fotos (cuando me las manden las publico) intercambiamos mails, los dueños del local prepararon variedad de tartas para el almuerzo, aunque nos llamaron a comer varias veces, porque estabamos todos (habia un muchacho, así que el plural en masculino, a pesar de ser 11 mujeres, cosas del idioma) entusiasmados con los husos y no los queriamos soltar, jajaja.
Cuando hicieron este recreo me fui con Wendy y Belén (canadiense y española respectivamente, que cosmopolita, jajaja)a recorrer la famosa Scalabrini Ortiz con sus lanerias, nos compramos vellón para practicar y yo también (acá se abrió el techo y bajó un halo de luz) agujas circulares números 3 1/2 y 5, a $10 y $12, marca Imra. (Acá en Bahía una número 6 de esa marca la pagué $23, se imaginaran lo que pensé del comercio local cuando me dieron los precios allá).
A la vuelta a probar las ruecas a pedal y eléctricas, aprender un poco más, y quedarnos charlando. La verdad, no esperaba encontrar gente tan simpática como la que me encontré.
A la salida
Belén me acompañó a buscar y encontrar el libro, Mil gracias! después me volví a retiro cuando aún quedaba algo de sol. Llegué a las 18. A las 22.35 salia el bondi. Estaba podrida del humo, la velocidad, la gente, el ruido, el sueño de no haber dormido nada en el viaje de ida, así que esas horas pasaron lentas pero rápido a la vez, no sé como describirlo.
Subí al bondi, y jamás me sentí tan contenta de volver a Bahía.
Ya estuve tratando de hilar un poco, en las fotos van a ver un pequeño ovillo amarillento, eso lo hilé durante el curso, lo que está en el huso, es lo que hice sola acá en Bahia. Espero aprender pronto a hacer el hilo parejito, vamos a ver cuando tejo algo con eso, debe ser una sensación muy linda.

Lo único que traje (salvo un regalito para mi hermano, pobre Andy, no ligó nada y encima lo llamaba a cada rato, jajaja) fueron estos "materiales de trabajo": el libro (excelente, vale cada centavo), el vellón, las agujas circulares y el huso que nos regaló Horacio.

Otra vez lo mismo, pero conmigo diciendo "My precioussss"